A propósito del Día Internacional de la Mujer, mirémonos todas y seamos felices por siempre.

Cada año conmemoramos el día internacionales de la mujer; una fecha a la que el día de hoy se le dedican muchos artículos de opinión, desfiles, protestas y un sinfín de actividades que nos hacen recordar más que los logros, las asignaturas pendientes de resolver para las mujeres del mundo en su ámbito personal, laboral, familiar y de justicia, entre otras áreas  de análisis.

 

La Fundacion del Conde cuenta con un programa denominado “Mirate y Sé Feliz”, mediante el cual aportamos nuestro “grano de arena”  para lograr el empoderamiento, desarrollo y bienestar de la mujer.

Este programa lleva 10 años de operar en el Estado de Veracruz  y por él han pasado cientos de mujeres que buscaban una respuesta a la inquietud que tenían, algunas ya de varios años y que en algunos casos  ya se había convertido en angustia, frustración e incluso depresión,  por no sentirse a gusto  consigo mismas en cuanto a su físico. Algunas por sobrepeso, otras por el paso  del tiempo y más que nada por una consecuencia natural después de haber dado a luz a uno o varios hijos.

 

En algunos casos,  esa inseguridad e insatisfacción con ellas mismas también es consecuencia de que algo en su interior no las deja disfrutar de sus logros, de su entorno y a veces de su vida misma. A menudo su historia personal y los recuerdos tampoco lo permiten o en ocasiones la pareja es la que ha frenado esos sueños.

 

En cualquiera que sea el caso o la historia que lleva a las mujeres a tocar las puertas de la Fundación para ingresar al programa “Mírate  y sé feliz”, casi siempre el común denominador es la decisión que cada una de ellas tomó a partir de la reflexión que hicieron y que las llevó a concluir que “ya es tiempo de dedicarse a sí mismas”.

La gran mayoría refieren venir de etapas complicadas que casi siempre tienen que ver con la atención a sus hijos, a sus parejas o a diferentes problemas que desencadenaron crisis complejas en cada una de sus vidas y durante las cuales la atención a su persona quedó relegada a un segundo o tercer plano incluso.

 

En Mirate y se feliz se les ofrece a las pacientes que ingresan al programa, diferentes herramientas de la Medicina y la Cirugía Estética, así como un acompañamiento psicológico y médico, sin pagar un solo peso, para que puedan transitar por un proceso de varios meses, en el que entre otras cosas llegan a su peso ideal y en ocasiones y dependiendo de un estricto protocolo médico, se selecciona a algunas candidatas para la realización de diferentes cirugías estéticas para corregir totalmente lo que  la dieta no ha podido  eliminar.

Durante todo el proceso se les da un intenso  acompañamiento psicológico y asesoría nutricional, así como la aplicación de diferentes tratamientos de Medicina Estética con aparatología de primer nivel.

Es importante mencionar que este programa está enfocado a mujeres que no podrían costear todos los tratamientos y  procedimientos que durante este programa reciben.

 

Escuchar las  historias del por qué tomaron la decisión de aplicar para participar en este vanguardista programa, es como ver un cuadro con muchos matices de colores y formas,  en donde la tristeza, la desilusión, frustración o miedo convergen también con situaciones derivadas de la felicidad, valentía, inspiración o simplemente deseos de superación de muchas de ellas.

 

Sin lugar a dudas la mejor parte para las participantes del programa, así como para todos los que trabajamos en la Fundación, es el momento casi mágico en el que las mujeres  se encuentran con ellas mismas, muchas después de haberse perdido así mismas por un buen tiempo, así como a su esencia y recobran no solo una figura e imagen que ya consideraban imposible de lograr,  sino una seguridad y una identidad que refleja la mejor versión de ellas mismas, en la que un físico envidiable está sustentado en un balance entre diferentes componentes que forman parte de su vida, como lo es el factor psicológico y la implementación de nuevos hábitos de vida sana como una alimentación saludable, la práctica de ejercicio o diferentes técnicas y  herramientas terapéuticas para tener un mejor desempeño en cualquier ámbito de su vida.

 

Todo eso hace “Mirate y sé feliz” a diario por muchas mujeres que desde hace diez años han participado en este programa social. No obstante, el día de hoy nos toca decir que como sociedad debemos de hacer todo lo que esté en nuestras manos para aportar lo que podamos y lograr que como sociedad  las mujeres tengan mayor equidad y que esta implique más y mejores oportunidades laborales, más seguridad en cualquier ámbito y que dejen de sufrir acoso, violencia, injusticias y tantas otras cosas que aún siguen padeciendo como parte de un cáncer social que nos afecta a todos en general.

Por último, recordemos  no solo este día sino los otros 364 restantes, que es necesario luchar por una equidad de género que le permita a las mujeres y a las niñas tener una voz contundente y clara para que  participen en igualdad en la toma de decisión de cualquier ámbito en el que participen.